Navegar por Internet y usar las tecnologías digitales puede facilitarte numerosas oportunidades en todos los aspectos de tu vida: la escuela, el trabajo, el tiempo de ocio, etc. No obstante, para disfrutar plenamente de estos beneficios te recomendamos que integres en tu comportamiento digital una serie de pautas de ciberseguridad para combatir riesgos como el malware. ¡Verás que sencillas!
En esta guía conocerás los principales tipos, así como los mejores consejos para identificarlos.
Los principales tipos de malware a los que debes prestar atención
Un malware es un software que se infiltra en tu ordenador con alguna intención maliciosa. Su propósito puede ser muy diverso, es por eso que, para facilitar que puedas detectarlos rápidamente hemos creado una lista con los seis principales tipos de malware y sus características.
Virus informático
El virus es, a buen seguro, uno de los malware que más te sonará. La meta principal que persigue es alterar el funcionamiento de tu ordenador. Sin embargo, una de las principales ventajas que tienes a tu disposición es que no puede actuar sin tu intervención.
En este sentido, son totalmente visibles y viajan por tu ordenador a través de archivos ejecutables (es decir, que les puedes hacer clic). Los podrás identificar porque acaban en .exe. Sin embargo, tienen el nombre de una aplicación falsa para engañarte y que los abras. Es importante, en este sentido, que solo abras ficheros de fuentes confiables para evitar este tipo de contratiempos y que cuides las descargas, permitiendo solo aquellas que proceden de sitios web seguros.
Gusano informático
El funcionamiento del gusano informático es similar al de un virus, aunque con un pequeño matiz. No requiere tu intervención, ni tampoco la modificación de un archivo en concreto. Tiene la capacidad de expandirse por tu ordenador y llegar a tu lista de contactos. De esta forma, a través de tu base de datos, puede reproducirse y llegar a otros equipos.
Este tipo tiene una mayor complejidad a la hora de que lo puedas detectar. No afecta al funcionamiento general del equipo, aunque sí consigue que algunas tareas rutinarias que llevabas a cabo se vuelvan más lentas. El lado positivo, es que prácticamente todos los antivirus protegen ante este tipo de malware.
Troyano
¿Conoces la historia del caballo de Troya que aparece en la Odisea de Homero? Tras años de batalla, los griegos no consiguieron sobrepasar los altos muros de la ciudad troyana hasta que se decidió llevar a cabo un plan de engaño: entrar camuflados dentro de un caballo de madera.
En este caso, el troyano actúa de una forma similar. Al ejecutar un archivo que piensas que es legítimo, este en realidad es un troyano. De esta forma, es capaz de robar parte de tu información confidencial. Igual que en el caso anterior, con un buen antivirus actualizado tus dispositivos contarán con protección frente a este tipo de ataques.
Spyware
El objetivo del spyware, en este caso, es recolectar información personal de tu ordenador que sea sensible sin tu autorización. No hace falta tu intervención para su instalación, ya que este software malicioso puede hacerlo por sí solo. Actúa sin dejar rastro, por lo que podrás seguir llevando a cabo todas tus actividades rutinarias en el equipo.
Sin embargo, el spyware es capaz de monitorizar y recopilar todos los datos que encuentre en tu ordenador y en tu disco duro. Asimismo, tiene acceso a tu historial de navegación en Internet y a todas las aplicaciones que haya podido instalar. Por otro lado, tiene la capacidad de añadir sus propias aplicaciones.
Adware
A diferencia de otros tipos de software malicioso, éste aparece a través de la publicidad. Cuando navegas por Internet, en algunos sitios web puedes encontrarte con diferentes tipos de ventanas emergentes que no te dejan en paz. Intentas cerrarlas, pero siguen apareciendo. Por suerte, solo se encuentran en una pequeña parte de los sitios web.
Puedes confundirlo solo con publicidad no deseada, pero puede llegar a captar tus datos personales. Por esta razón, los expertos alertan del adware.
Ransomware
Es una de las metodologías de phising más habituales en los últimos tiempos. ¿Qué significa esto? Básicamente, las y los ciberdelincuentes se hacen pasar por una de tus fuentes confiables. Es un tipo de amenaza muy enfocada a las empresas ya que su pauta de actuación es el secuestro de datos, por el que pedirán un rescate económico posteriormente.
Al abrir uno de sus correos electrónicos, son capaces de ingresar el software. Posteriormente, te aparecerá un mensaje en la pantalla informándote del ataque. Podrás pagar el rescate a través de SMS, PayPal o bien criptomonedas. Por suerte, son uno de los más fáciles de prevenir, ya que solo debes estar alerta a la hora de abrir los mensajes que lleguen a tu bandeja de entrada de correo electrónico.
Cómo identificarlos fácilmente
Una vez ya conoces los principales tipos de software malicioso, es fundamental que conozcas las formas de identificarlos rápidamente. Además, queremos darte algunos consejos para que puedas conseguir la protección para tu equipo de todas las amenazas que puedes encontrar en Internet. De esta forma, navegarás sin preocupaciones.
Una de las primeras señales de alerta es un rendimiento lento del equipo. Puede deberse a muchas razones, como la falta de espacio en el disco duro o una memoria RAM limitada, por lo que es importante que tomes con precaución esta hipótesis y sigas investigando. También hay que prestar atención a si tu equipo tiene problemas tanto para encenderse como para apagarse.
Internet también puede darte algo de luz acerca de si tu equipo está infectado por un software malicioso. En el caso de que quieras ir a un sitio web y acabes yendo a otro totalmente diferente con asiduidad puedes indicar una señal de peligro. Lo mismo en el caso de que te aparezcan más anuncios emergentes de lo habitual, o te salgan mensajes de que tu equipo está infectado y te intenten vender antivirus.
Estas son algunas de las principales alertas, pero es importante que tengas claro cómo protegerte para que puedas acabar con todas estas amenazas.
Principales medidas contra softwares maliciosos
Una de las primeras prácticas que debes incluir a la hora de navegar por Internet es confiar solo y exclusivamente en aquellas fuentes que sean fiables. En este sentido, a la hora de descargar programas, no lo hagas de sitios web de los que desconfíes.
Lo mismo ocurre con la bandeja de entrada de correo electrónico. Solo abre correos de aquellas personas que sean de confianza. Sobre todo, debes desconfiar de hacer clic en enlaces comerciales, si no vienen de fuentes que hayas solicitado. Esta es la primera medida para prevenir tu ordenador adecuadamente contra un software malicioso.
En otro orden, debes aplicar la misma lógica con los anuncios que veas en Internet, y, sobre todo, con aquellos que tengan ofertas comerciales dudosas. Es importante que tengas guardados en lugares seguros todos tus datos sensibles como las claves de acceso a tu cuenta bancaria online. Cuando el ordenador te ofrezca guardar contraseñas, dile que no, ya que en caso contrario tendrías la clave en el equipo y podría ser robada por un ataque malicioso.
Todos tus datos más importantes deben ser guardados en una copia de seguridad. De esta forma, si tu ordenador se infecta y necesitas restablecerlo de cero podrás mantener todos los archivos y ficheros que puedas necesitar. Para ello, en tu PC deberás ir al panel de control y seleccionar la opción de sistema y mantenimiento.
Posteriormente, selecciona copia de seguridad y restauración. Elegirás la opción de crear una imagen del sistema y deberás seguir los pasos que te indique el asistente de instalación. En el caso de que te soliciten una contraseña de administrador, deberás ponerla.
Contar con un antimalware también te ayudará a prevenir y tener tu equipo bien protegido. Uno de los más recomendables es Avast. Actualmente, ya está presente en aproximadamente el 40% de los equipos del mundo. Encontrarás una versión totalmente gratuita, y además es accesible.
Lleva a cabo revisiones de tu ordenador de forma automática, y cuenta con un sistema de notificaciones claro. Te da toda la información que necesitas para actuar en consecuencia. Si tu sistema operativo es Windows puedes recurrir directamente al antivirus que viene instalado en tu ordenador, Windows Defender.
Otra de las opciones, especialmente para pymes, es malwarebytes. Sirve tanto para empresas como para particulares. De forma gratuita, ofrece un escaneo de tu equipo para conocer su estado y saber si está infectado.
Como conclusión, la aplicación de este manual de buenas prácticas te permitirá acabar con los malware rápidamente y navegarás por Internet de una forma totalmente segura.
Desde nuestro proyecto, te invitamos a seguir formándote en ciberseguridad a través de los demás apartados de esta Guía de Ciberseguridad. ¡Te esperamos!