El avance tecnológico ha traído consigo un sinfín de oportunidades y facilidades en nuestro día a día. Sin embargo, al igual que en el mundo real, en el digital existen personas con intenciones maliciosas. A continuación, aprenderemos a identificar y prevenir las estafas más comunes en el mundo online.
Conociendo las estafas más frecuentes
Así como hay timos y trucos en la calle que reconocemos porque hemos escuchado hablar de ellos, en el mundo digital existen estafas que se repiten con cierta frecuencia. Al conocerlas, estaremos un paso adelante para evitar caer en ellas.
- Phishing: Se refiere a los intentos de obtener información confidencial de forma fraudulenta. Puede ser a través de un correo electrónico que aparenta ser de una entidad conocida, solicitándonos datos personales o contraseñas. Un ataque de phishing que vemos con frecuencia es el de los SMS. Recibimos lo que parece una alerta de nuestro banco o un mensaje de un familiar que dice haber perdido el móvil. Normalmente, todos estos ataques tendrán como objetivo que hagamos clic en un enlace fraudulento o que proporcionemos nuestros datos. Cuando te encuentres ante esta situación, si tienes dudas de la veracidad de la información, siempre puedes ponerte en contacto con la entidad o la empresa a través de un canal oficial de comunicación antes de dar la información que te solicita.
- Estafas con premios falsos: ¿Alguna vez has recibido un mensaje diciendo que has ganado un premio? Mucho cuidado, porque podría ser un truco para obtener tus datos o hacerte pagar por un premio que no existe. Si no has participado en ningún concurso, seguramente se trate de una estafa.
- Ofertas de trabajo falsas: En ocasiones, podemos encontrar ofertas de trabajos muy atractivos cuya intención solo es recopilar tus datos personales o pedirte dinero por adelantado.
Señales de alerta para identificar una estafa
Al igual que cuando algo nos parece sospechoso en la vida real, hay ciertas señales en el mundo digital que nos pueden advertir de una posible estafa. Es esencial prestar atención a las pequeñas pistas que los estafadores, por más astutos que sean, suelen dejar.
- Errores gramaticales y de ortografía: Los mensajes de estafa a menudo contienen errores. Un banco o empresa seria se asegurará de que sus comunicaciones sean claras y correctas.
- Direcciones de correo sospechosas: Son muchas las ocasiones en las que el correo electrónico que envía el mensaje no coincide con el nombre que aparece. Por ejemplo, que el nombre sea Apple, pero el correo electrónico sea 1234@gmail.com. La compañía tecnológica nunca enviaría un mensaje con esa dirección.
- Solicitudes inesperadas de información personal: Desconfía siempre de los correos que te piden datos personales o bancarios sin motivo aparente.